Pájaros en la cabeza...

No sé qué pasa. Esto está comenzando a convertirse en una guerra interna conmigo misma o algo parecido. La cosa es que siento como si llevase un elástico en mi interior. De una punta tira mi cabeza, y de la otra mi corazón. Voy escuchando una voz en mi mente que me dice ‘haz esto’ o ‘haz lo otro’ que es bueno para ti, mientras que mi corazón siente cosas, muchas veces, contradictorias. A veces ella es más fuerte y, en ocasiones, lo es él. La cosa es que mientras uno y otro van tirando y aflojando me voy dando cuenta de que no sólo me afecta a mí, sino que esa goma va golpeando a cuánto me rodea. Mi corazón y mi cabeza ya podrían ir por el mismo camino… Ya podría sacar esos pájaros de la cabeza.

Pienso que en cualquier momento esa goma puede romperse y pegarme en la cara. No sé qué hacer, ni cómo actuar, si hago bien o hago mal. Es un ni contigo, ni sin ti. Es un blanco y negro, arriba y abajo, amor y odio que a veces me deja sin aliento. Es un querer ponerme de acuerdo conmigo misma sin salpicar a nadie. Escapar o quedarme… Pienso que poner tierra de por medio es una buena solución, pero por momentos siento que he vuelto a echar raíces en este lugar… ¿Y si me voy y sigo llevándome mis contradicciones? ¿Y si me voy y pierdo algo importante? ¿Y si me quedo y es para nada? No sé cuánto tiempo será así… 

Hay días en los que me veo atrapada en una espiral donde todas las cosas buenas y malas que me están sucediendo se agolpan entrando a la vez en mi mente. Intento quedarme con las buenas y olvidar las malas. Intento disfrutar de lo que tengo sin pensar más allá de lo que es o de lo que podría ser. Intento ser fiel a mí misma, a lo que pensé, a lo que pienso… y me doy cuenta que los esquemas sólo son eso, ideas que puede que jamás se cumplan… y que la vida se va conformando día a día con lo que sucede, con los que te quieren de verdad, y que lo tenga que ser será, piense más o piense menos…

Que me deje llevar... Lo intento.
Ya sé que estos días voy y vengo. Aparezco y desaparezco. Río y lloro. Aprieto los dientes y cojo aire con la mirada perdida. Lo siento, de verdad. No es mi intención.

1 comentario:

  1. Es dificil dejarse llevar, por mucho que uno quiera, más sencillo es decirlo. Cuando tienes tantas cosas dando vueltas en la cabeza, es normal que te sientes medio confundida, aturdida y de todo. Bueno, ya irán llegando los momentos de tranquilidad.

    Un beso cielo

    ResponderEliminar